TESTIGOS DE JEHOVÁ Y TRANSFUSIONES
Fuente: www.mancia.org
Un
hombre que padecía patología circulatoria murió ayer en el Sanatorio
Julio Corzo, ubicado en la ciudad de Rosario, República Argentina, tras
negarse a una transfusión de sangre argumentando motivos religiosos.
Un hombre que padecía patología circulatoria murió ayer en el Sanatorio
Julio Corzo tras negarse a una transfusión de sangre argumentando
motivos religiosos. El hombre, de 59 años y testigo de Jehová, había
firmado un documento en el que se negaba a ser sometido al tratamiento y
aunque las autoridades médicas del sanatorio se habían presentado a la
Justicia, la magistrada Raquel Cosgaya consideró que “hay que respetar
los deseos y las creencias”, y agregó: “No estamos ante un caso de
abandono de persona”.
El paciente había ingresado al centro de salud de San Juan 3034 el 19
de marzo. Según detalló el director médico, Américo Daminato,
presentaba “un problema circulatorio complicado, tenía una indicación
quirúrgica y dado su cuadro se planteó la necesidad una transfusión”.
Pero el paciente, su esposa y hijos se negaron. “Argumentando
creencias religiosas, él y su familia rechazaron la transfusión y
firmaron un documento. Entonces se puso en marcha una terapia
alternativa con eritropoyetina, que como demora más tiempo dio un
resultado parcial”, detalló Daminato.
El médico hizo hincapié en que la familia “conocía y había sido
informada de los riesgos que implicaba no realizar el tratamiento,
incluso de que existía riesgo de vida”.
Pese a eso, la familia mantuvo su posición y el cuadro del paciente
se agravó. Por eso fue trasladado a terapia intensiva y sometido a la
cirugía con medidas terapéuticas sustitutivas.
“En las últimas horas el cuadro era crítico y se volvió a plantear la
opción de la transfusión, pero volvieron a negarse. Allí, se recurrió a
la Justicia para dejar constancia de la situación”, explicó el director
del Julio Corzo, que dijo que la decisión fue “propia del sanatorio y
de los médicos, sin la mediación de ningún otro familiar”.
El pedido recayó sobre la jueza de Instrucción Raquel Cosgaya, que tras
constatar la originalidad de los documentos firmados por el paciente y
sus familiares, no autorizó la práctica. Finalmente el hombre falleció
ayer, a la 1.30 de la mañana.
La magistrada estableció que con acuerdo de su esposa y dos hijas el
paciente había dejado una constancia donde manifestaba su voluntad de no
ser transfundido. Por lo que sólo procedió a ordenar al sanatorio que
no realizara la práctica.
“Hay que respetar los deseos y las creencias. Los médicos expusieron
que era necesaria la transfusión, pero respetaron la voluntad del
paciente”, indicó Cosgaya.
Fuente: LaCapital.com.ar de Rosario - Se negó a una transfusión y falleció - La Ciudad
1 comentario:
Mas alla de la patologia de base, el sobrevivir en ese lugar,ES UN MILAGRO.Ese antro llamado sanatorio es un desastre.
Publicar un comentario