POR NO TRATAR LA INFECCIÓN QUE APARECIÓ TRAS UNA MAMOPLÁSTIA


Un juzgado condena a un cirujano plástico a indemnizar con 25.857 euros a una paciente por una mala praxis


Un cirujano plástico ha sido condenado a indemnizar a una paciente con 25.857 euros, al considerar el juez que hubo negligencia en una operación de aumento de pecho. La mujer, intervenida en una clínica privada, acabó hospitalizada por una infección grave durante nueve días en el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla.

Sabtiago Rego Santander - Lunes, 18 de Octubre de 2010 -
Fuente: diariomedico.com
El Juzgado de Primera Instancia número 7, de Santander, vistos los informes de los peritos sobre el proceso médico y la valoración de los daños causados en la mujer, sentencia que el cirujano demandado debería haber aplicado "antibioterapia profiláctica que evitara la infección", y que existió una "defectuosa información previa a la paciente", de 34 años de edad, que abonó 3.100 euros por la cirugía para conseguir una talla 90 o 95 de pecho, según consta en el relato de los hechos probados.

Cinco días después

Una vez operada de ambas mamas, a los cinco días de la cirugía comenzaron los problemas. EI cirujano curó con una crema y gasas un problema surgido en una de las mamas, y cuando acudió a su médico de cabecera en la sanidad pública a recoger el parte de baja, le colocaron un algodón con antibiótico en el orificio, que el cirujano plástico decidió retirar, optando por cerrar el agujero con grapas.



Aunque el cirujano alegó ante el juzgado que la infección se produjo por una deficiente actuación en el centro de salud de primaria de la paciente, lo cierto es que el médico forense certificó que ésa es la manera correcta de hacer la cura. Al cabo de un tiempo a la paciente se le abre otro orificio en la mama y ante esta complicación el cirujano decide extraerle la prótesis para revisar el hueco.



El fallo judicial considera una práctica negligente que el cirujano volviera a introducir en la mama afectada la misma prótesis, un procedimiento que en la sentencia consta que no se debería haber hecho, "porque no tiene garantía de asepsia". La paciente no se recuperaba con normalidad y el cirujano insistía en que no había infección al no presentar fiebre ni oler mal la herida; tras extraerle un tapón de pus, la mujer acudió, sin embargo, al servicio de Urgencias del Hospital Valdecilla, donde le confirmaron el cuadro infeccioso que ella sospechaba desde un principio. La sentencia recoge que la mujer estuvo ingresada 19 días con antibioterapia en vena, tras la extracción del líquido purulento, lo que le llevó, según el perito, a tener que recibir asistencia por un trastorno adaptativo mixto. Meses después de estar totalmente curada, fue operada de nuevo, esta vez en el Servicio Cántabro de Salud (SCS), donde le reconstruyeron las dos mamas.